Tenía en el frutero unas manzanas que tenían pinta de pasar a mejor vida.
Les corté las partes que no me daban confianza, las trocé. Les espolvoreé con canela, puse unas cuantas nueces y miel disuelta en un poco de jugo de limón.
Luego a un horno precalentado a 180°C por 25 minutos y listoco. Nom nom.
Lamentablemente no, y ya se acabó. La verdad, creo que quedé corto de miel, pensé que las manzanas estarían más dulces porque estaban excesivamente maduras, pero no lo fueorn tanto.
Pero viviendo y aprendiendo. A la próxima le pondré más miel.